Por Horacio Elsinger
No hace mucho un columnista de derecha planteó que a diferencia de Fidel Castro, que en los años 60 y 70 exportaba la revolución a través de la política y la ideología, actualmente el venezolano Hugo Chávez lo hace a través de los "petrodólares".
La afirmación sin duda pretende menoscabar la importancia de la experiencia revolucionaria que viene llevando adelante el pueblo venezolano. Sin embargo, el aplastante triunfo obtenido por el sí este domingo en la consulta popular llevada a cabo en Ecuador para saber si la mayoría de la población está de acuerdo con una reforma constitucional que refunde el país viene a refutar estas apreciaciones.
No es verdad que la capacidad de propagación de la revolución bolivariana esté ligada solamente a que Chávez utilice los excedentes de la renta petrolera para asistir a los sectores más desamparados de su país y para propiciar acuerdos energéticos y económicos que faciliten la integración regional. La fuerza de la experiencia bolivariana se basa también en que ha mostrado al resto de los latinoamericanos una fórmula para poner en marcha procesos revolucionarios: la Asamblea Constituyente.
La afirmación sin duda pretende menoscabar la importancia de la experiencia revolucionaria que viene llevando adelante el pueblo venezolano. Sin embargo, el aplastante triunfo obtenido por el sí este domingo en la consulta popular llevada a cabo en Ecuador para saber si la mayoría de la población está de acuerdo con una reforma constitucional que refunde el país viene a refutar estas apreciaciones.
No es verdad que la capacidad de propagación de la revolución bolivariana esté ligada solamente a que Chávez utilice los excedentes de la renta petrolera para asistir a los sectores más desamparados de su país y para propiciar acuerdos energéticos y económicos que faciliten la integración regional. La fuerza de la experiencia bolivariana se basa también en que ha mostrado al resto de los latinoamericanos una fórmula para poner en marcha procesos revolucionarios: la Asamblea Constituyente.
Ese es el camino que iniciaron los venezolanos, que siguió después Bolivia y que ahora adopta Ecuador. Si bien se trata de un camino que no puede ser elevado a fórmula universal y ni siquiera a la totalidad de América Latina hasta el momento ha demostrado su aplicabilidad en los tres países citados.
Apenas llegó Chávez al poder a través de elecciones llamó a una Asamblea Constitucional que sentó las bases de la democracia bolivariana. Fue la legalidad nacida de la nueva Constitución y la movilización popular que ella suponía lo que le permitió al venezolano resistir las sucesivas conspiraciones de la reacción de su país.
Por otra parte, el camino de la Asamblea Constituyente adoptado hasta el momento por Venezuela, Bolivia y Ecuador es uno de los rasgos singulares de la nueva situación que vive nuestro continente si se la compara con la agitación revolucionaria generada por la revolución cubana en los 60 y 70.
En aquellos años Cuba producto del aislamiento en que rápidamente la colocó el imperialismo busco hacer pie en "tierra firme" tratando de propagar la llama de la revolución al resto del continente. La fórmula que la revolución cubana "exportó" en ese momento se resume en la "teoría del foco". No es aquí el lugar para ponermos a examinar con detenimiento esa opción revolucionaria, pero sí podemos decir que su idea central es que un grupo de revolucionarios bien preparados y decididos (la vanguardia) puede crear en la población a través de su accionar la condiciones subjetivas para la revolución.
El relato de un reducido grupo de revolucionarios que primero desembarca en las playas de Cuba y tras una serie de peripecias inicia una guerra de guerrillas en la Sierra Maestra que termina con la toma del poder en La Habana encendió la imaginación y llevó a la acción a miles de jóvenes revolucionarios en nuestro continente. La experiencia foquista en nuestro continente fue nefasta y estaba condenada al fracaso desde su inicio por el voluntarismo mesiánico que anidaba en ella.
Si bien todo intento de reproducir acríticamente una experiencia o de encontrar en ella una fórmula universal o continental para la revolución entraña grandes riesgos como la propia experiencia lo índica, la superioridad del relato bolivariano respecto del "foco" consiste en que sitúa como protagonista de la historia no a una vanguardia esclarecida y armada sino a las grandes masas ejerciendo su derecho soberano a través de la Asamblea Constituyente.
Cuarenta años después de que Fidel y sus barbudos entraran en La Habana la revolución ha tocado tierra firme y avanza por el continente no a través de una vanguardia armada sino de millones de hombres y mujeres comunes que quieren ser protagonistas.
4 comentarios:
Amigo, está muy bueno el texto. A propósito de la Venezuela de Chávez, te recomiendo que leas una nota que subí a mi blog. Te lo recuerdo: www.davidetafiviejo.blogspot.com
Muy bueno tu artìculo sobre las diferencias entre el proceso
revolucionario
cubano y la revoluciòn bolivariana.
Tu análisis del foquismo es impecable.
Solo quiero hacer un par de comentarios ,acerca de interrogantes que
surgen
del texto.
El primero,sobre el llamado socialismo siglo xxi,concepto por demàs
ampuloso
,para llamar a lo que en realidad se trata de un desarrollo capitalista
autocentrado. Pero asi tomado el concepto,se articula con el segundo
problema a resolver.
Y se trata e un viejo asunto discutido por largos años , y que vuelve a
estar en el tapete actualmente ,tomado de tu excelente publicaciòn .
Y se trata de el tema de la necesidad de construcciòn delPartido
revolucionario. Tal construciòn es un tema que se puede soslayar, o es
un
reaseguro de la continuidad y triunfo de las banderas revolucionarias.
Fidel tambièn llegò al gobierno sin Partido. Chavez ,en ocasiones
,habla del
partido Unico de la revoluciòn. Pero en tèrminos generales, es una
discusiòn,pendiente , que nos debemos los miloitantes de la Izquierda
>nacional,si estamos dispuestos a no dejar caer las banderas del
socialismo
y la unidad latinoamericana.
Serìa muy de mi agrado si pudièramos llevar a cabo fraternalmente èsta
discusiòn. Un abrazo. Jorge
Muy claro tu artículo amigo Horacio. Debo reconocer que me ayudo a comprenderlo el libro que me prestaste. Pegale una mirada al artículo de mi blog sobre un rosarino que esta reeditando "Diario de Motocicleta" del que ya hemos hablado. Un abrazo
LA CAMPAÑA CONTRA EL MERCOSUR EN PARAGUAY
(Por Luis Agüero Wagner- (http://disparencontraelmercosur.zoomblog.com)
ITAIPÚ, SUPUESTA MANZANA DE LA DISCORDIA
Por estas fechas en que un grupo empresarial comprometido con el golpismo militar que sòlo produce telenovelas para infradotados es el emblema de la libertad de expresión, me resulta irresistible emitir un comentario sobre lo elástico que resulta el tema de Itaipú para cierta prensa con delirios de poder paralelo, sobre todo ante la insistente campaña de los bushistas trasnochados y partidarios del ALCA que predominan en los medios de comunicaciòn.
Primero, debo decir que resulta lamentable el espectáculo de ciertos políticos pusilánimes exhibidos cual trofeo del amo de ABC color, el señor Aldo Zuccolillo(ver http://luisaguerowagner.zoomblog.com), cuando se allanan a seguir su línea editorial contra el Mercosur, buscando instrumentar el tema de las hidroeléctricas para crear disturbios en el bloque regional, como si nos faltaran problemas en el país y el subcontinente. Y tanto más notorio el triste papel de títeres al tratarse de medios de comunicación bien conocidos por sus vinculaciones directas e indirectas con intereses imperiales extranjeros a la región, y su anacrónico Maccarthismo que pareciera ignorar que la guerra fría finalizó hace casi dos décadas.
Resulta realmente lamentable ver en ese papel a tribunos con auténtico predicamento político como Miguel Abdón Saguier, o a supuestos izquierdistas como Ricardo Canese.
Como no constituye sorpresa, acompaña a Zucolillo en su campaña el ex animador de los cumpleaños de Stroessner Humberto Rubìn, que en 1987 cerrò de motu propio su radio para no pagar sueldos a sus empleados con los 341.000 dòlares que la Nacional Endowment for Democracy le facilitò para el efecto.
En segundo lugar, debería discernirse que ni los gobiernos de Brasil o Argentina son responsables del inmediatismo de algunos líderes políticos paraguayos, por demás carentes de legitimidad e invalidados como interlocutores desde un principio, cuando estos posponen renegociaciones a cambio del metal envilecedor imprescindible para comprar conciencias durante sus campañas políticas. Quienes no tenemos una memoria dependiente de las dádivas de la publicidad oficial, ni tenemos motivos para defender a actores de reparto que se dedican a seguir la línea editorial de la patria periodística para aparecer en sus espacios, todavía tenemos fresco el recuerdo del viaje del senador Carlitos Filizzola Pallarés a Brasilia en diciembre de 2005, supuestamente para hablar de la renegociación de Itaipú, pero en la vida real para claudicar ante Lula, y traer a su jefe Nicanor 20 millones de dólares para financiar su campaña en la interna colorada de febrero de 2006.
En tercer lugar, que no tienen autoridad moral para censurar el entreguismo de ningún gobierno quienes albergan en sus filas a notorios voceros de coacciones externas desnacionalizantes pagadas por embajadas extranjeras.
Sin negar que cualquier tratado internacional es pasible de exhibir defectos de forma y contenido, difícilmente pueda aceptarse el papel de censor de una prensa fabuladora, sin autoridad moral ni compromiso con la verdad, que jamás ha pretendido ocultar sus tendencias socialdarwinistas y ultraderechistas al enfocar temas económicos y políticos, su hipocresía a la hora de condenar una dictadura que alabó por décadas, ni tampoco su ocasional visión legionarista y anti-nacional de la historia paraguaya en el enfoque de sus momentos culminantes. Aunque lleve décadas disfrazando de nacionalismo sus incontenibles afanes de convertir Itaipú en la manzana de la discordia del Mercosur, al tiempo de erigirse en abogada de expoliadores intereses extranjeros -eventualmente brasileños- que operan en el país prometiendo redimirlo, presentándose fraudulentamente como voceros de los intereses generales de la sociedad.
Ya dijimos que los políticos necesitan de la prensa para hacer conocer al público que están constantemente defendiendo causas nobles, aunque sean muy magros los resultados de su accionar, sobre todo porque la cobertura periodística no abarca todos los azimuts del espacio, y las buenas intenciones pareciera que no existen si no están los fotógrafos. Este hecho invariablemente se repite en el caso que nos ocupa.
Bien haría el señor Zuccolillo en historiar el tratado de Itaipú sin omitir a sus íntimos que participaron de las mieles del negocio, ni tampoco olvidar que el tan cuestionado acuerdo pudo firmarse gracias a la legitimidad que dieron a Stroessner sus grandes amigos y asesores (?) en temas políticos como los hermanos Levi Rufinelli.
Del mismo modo que sería deseable que nuestros negociadores en temas como Itaipú exhiban mayor patriotismo y sean intransigentes a la hora de defender los intereses nacionales, algo que no está en discusión, tampoco estaría demás que ciertos políticos y parlamentarios de la oposición demuestran una mayor autonomía de pensamiento y originalidad a la hora de elegir sus reivindicaciones, que cada vez aparentan más ser campañas auspiciadas por ciertos diarios. Para colmo, justo los que están habituados a las más bochornosas campañas contra la verdad.
Para tener una idea màs acabada de quiènes son estos personajes que mantienen oprimida la superestructura en Paraguay, transcribo en artìculo siguiente de Nemesio Barreto Monzòn:
Cuando la CIA inició sus compras en Paraguay
Nemesio Barreto Monzón
barreto@rieder.net.py
El autoritario Dr. Carl Gershman, presidente de la NED, había venido “de compras a Paraguay”, pero no compró artesanía paraguaya sino otros “objetos de dudoso valor”.
En una carta de marzo de 1989 (1) el entonces embajador norteamericano en Asunción, Timothy Towell (2) reconoció que numerosas instituciones paraguayas habían recibido dinero de la National Endowment for Democracy (NED). Esta organización, “Fomento de la Democracia”, tenía desde 1985 una oficina en Montevideo, Uruguay. El embajador Timothy Towell mencionaba en su carta a los que recibieron dinero, entre ellos a “dirigentes laborales, medios de prensa, académicos”, etc. En cuanto “a los proyectos que están siendo considerados para asistencia futura -decía Towell- una lista definitiva y una distribución de los fondos aun se encuentran bajo estudio”. El embajador hacía también referencia a “los objetivos de la visita del Dr. Carl Gershman” a Paraguay. El “ilustre visitante”, el Dr. Gershman (3), presidente de la NED, había venido “de compras a Paraguay”, pero no compró artesanía paraguaya sino otros “objetos de dudoso valor”.
Un año antes de la clausura del diario “Abc-color” empezaron los rumores de que “una moderada suma de dinero” del gobierno norteamericano había ingresado a Paraguay con el objetivo de promover un cambio ajustado a los intereses norteamericanos. Era la época de los embajadores Arthur H. Davis (Jr.) y de Clyde Taylor. Este rumor, aunque solo en parte, no se confirmaría sino mucho tiempo después por la propia embajada de los Estados Unidos de América en Asunción. El generoso hombre de la billetera norteamericana no era otro que el señor Agustín Torres Lazo. Por entonces, y desde 1979, funcionaba en Asunción el “Instituto Americano para el Desarrollo del Sindicalismo Libre” (IADSL), que tenía su oficina en la calle Montevideo N° 822 (Archivo del Terror, Microfilm 00189F-0031). El Director del “Instituto” era Agustín Torres Lazo, un hombre vinculado a los americanos y a sus órganos de inteligencia. Fue suya la “genial” idea de incluir también a los patrones en el Sindicato de Periodistas del Paraguay.
Agustín Torres Lazo –ex diplomático nicaragüense nacionalizado norteamericano- consiguió en 1979 que el Departamento de Estado invitara por primera vez al ex policía Alcibíades González Delvalle. Así nació una fructífera relación entre el agente de los norteamericanos y el ex policía Alcibíades González Delvalle. Siempre en el rubro sindical, Torres Lazo también trabó amistad con Víctor Báez Mosqueira, quien al poco tiempo se convirtió en hombre de confianza de la embajada norteamericana en Paraguay (Archivos del Terror. Microfilm N° 00045F 2336). Báez Mosqueira fundó después el Movimiento Intersindical de Trabajadores (MIT), hoy es Secretario de la “Confederación Internacional de Organizaciones y Sindicatos Libres” (CIOSL). Más adelante aparecerían en escena otros dos hombres de muy diverso valor en metálico: Humberto Rubín y Aldo Zoccolillo, propietarios de Radio Nandutí y del diario “Abc-color” respectivamente. Rubín y Zuccolillo fueron invitados en noviembre de 1986 por George Bush, entonces Vicepresidente de los Estados Unidos de América (Archivo del Terror. Microfilm N° 00020F 0743).
El Informe de la National Endowment for Democracy (NED) 1987-1989
En 1987 Radio Ñandutí recibió de la NED 121.880 dólares “para la conducción de formas de orientación democrática con énfasis en la activa participación de la audiencia en su auditorio de 300 sillas”. Otros 92.400 dólares recibió de la NED para aguantar “las presiones gubernamentales”. Poco después recibió 86.900 dólares “para la compra de un nuevo transmisor”. A esto debe sumarse otros 41.000 dólares “para la publicación de libros”. En cifras redondas, Humberto Rubín recibió 342.000 de la NED. En cuanto al señor de la CIOSL, Víctor Báez Mosqueira, entonces líder del Movimiento Intersindical de Trabajadores, recibió de la NED 92.688 dólares “para fortalecer la libertad de los sindicatos”. Resumiendo, los clientes de la NED en Paraguay recibieron en conjunto 1.074.584 dólares entre 1987 y 1989. En un próximo artículo se dará a conocer la lista completa de los viejos y nuevos clientes de la NED, IAF, FREEDOM HOUSE, etc.
NOTAS:
1) Carta de Timothy Towell, del 13 de marzo de 1989, dirigida a Joaquín Burgos y Carlos Ferreira Ybarra. Fotocopia autenticada en poder del autor.
2) Timothy Lathrop Towell fue embajador desde el 26 de septiembre de 1988 hasta el 27 de abril de 1991. “Un acicalado individuo de unos sesenta años, elegantemente vestido (blazer azul, camisa blanca y corbata a rayas diagonales) se alzó entre el círculo de mesas. Era Timothy Towell, el jubilado y antiguo, pero omnipresente, embajador de EE.UU. en Paraguay. Luego de hablar de la manera de contrarrestar la amenaza de Chávez, alardeó: "He trabajado con John Maisto durante años, desde que estuvimos juntos en Cochabamba, Bolivia en 1967, cuando nos libramos de Che Guevara. Si eliminamos una amenaza, podemos librarnos de otras”. Fuente: La Fogata - Internacional. El Maestro Maisto (que va a estar en Mar del Plata) y la muerte de Che. Juan Bolipaine Rebelión Traducido para Rebelión por Germán Leyens. http://www.lafogata.org/05inter/inter11/in_4-2.htm - 13k -
3) Carl Gershman. Director del Fondo Nacional por la Democracia (NED). Que el señor Gershman no es ningún demócrata quedó en evidencia en agosto de 2005 en Estocolmo, Suecia, cuando a Eva Golinger, autora del libro El Código Chávez, (The Chavez Code: Cracking U.S. Intervention in Venezuela), Carl Gershman no le permitió participar en un panel. Joshua Mata, testigo presencial, señala cuanto sigue: “La confrontación entre Estados Unidos y Venezuela pasó a primer plano en el Encuentro de Fundaciones que Promueven la Democracia realizado en Estocolmo entre el 28 y 30 de agosto de 2005. En lo que muchos han considerado un despliegue escandaloso de unilateralidad y arrogancia, Carl Geshman, prohibió la presencia de la abogada estadounidense-venezolana Eva Gollinger en el panel”. Fuente: “La confrontación entre Estados Unidos y Venezuela”. http://www.focusweb.org/confrontaci-n-entre-estados-unidos-y-venezuela-tensiona-reuni-n-sobre-democ.html?Itemid=94 - 89k - Véase, asimismo, el diario sueco “Aftonbladet”: “Hon får inte delta” (“Ella no puede participar”). Artículo firmado por el periodista sueco Björn Kumm. Estocolmo, Suecia, 30 de agosto de 2005
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